DESHACER NUDOS DE LA VIDA CON VELAS NUDO

¿Quieres deshacer los nudos de tu vida, terminar con las trabas/obstáculos y los conflictos…? Aquí te muestro como deshacer nudos de la vida, con velas nudo.

Lo mejor, más aconsejable y efectivo siempre es acudir a un profesional en la materia, a un mago blanco experimentado con un prestigio y una experiencia contrastada, pero si el problema que te atormenta no es de extrema gravedad, puedes probar este pequeño “ritual” utilizando las velas nudo. Lo entrecomillo porque en sí mismo no se le puede considerar un Ritual per se, yo lo veo más como realizar una meditación de perdón, a uno mismo o hacia el exterior, con un elemento externo simbolizando lo que queremos…Dicho esto queda claro que lo importante en este “trabajo” es la sinceridad y la predisposición sincera del hacedor, la vela solo es algo simbólico en este caso…

Hay un dicho que dice: Todo lo que molesta, hay que sacarlo. De eso nos vamos a ocupar. ¿Trabas? ¿Conflictos? ¿Piedras en el camino? … Vamos a llamarlos “nudos”. ¿Por qué no? ¿Acaso no son cosas que queremos destrabar, deshacer o quitarnos de encima? En magia a todo esto se le llaman nudos energéticos, el motivo es porque nos impiden fluir con libertad hacia adelante en la vida, desatarlos es vital pues, para poder avanzar con libertad.

Estas velas las podéis conseguir en cualquier tienda especializada, o hacerla tú mismo, porque tampoco tiene mucha dificultad.

Ahora bien, de acuerdo al problema que tengas, debes pedir un color en particular. Como pequeño resumen os hablo de varios colores, si queréis saber más, como siempre sabéis que la información de esta web, esta ampliada en el foro www.tarotymagiablanca.com

Blancas: Para la salud, la paz interior, perdonar y perdonarte.

Violetas: Para aperturas o armonización de lugares o personas. Si la blanca es para algo interno, la violeta es más para los agentes externos, que obvio nos afectan, pero es más para tratar los conflictos con otros.

Naranjas: para la prosperidad y el dinero.

Rojas: para el amor y trabajos de destrabes en general.

Cuando hayas comprado la vela, lo más aconsejable es rodearte de un ambiente cálido y armónico que te permita concentrarte. Por lo tanto, quita todo aquello que te distraiga (televisión, luces, objetos brillantes…). Si hay ruido en el exterior que te moleste, tienes dos opciones o te pones tapones o música que no te altere. Por lo que busca el lugar de tu casa donde te sientas más cómodo, coloca algún recipiente para poner la vela, un plato blanco por ejemplo sirve.

Escribe tu nombre completo o el de las personas a las que quieras ayudar en un papel blanco sin uso previo y colócalo debajo del plato.

Puedes complementar este ritual con la presencia de alguna prenda propia o de la persona a la que se quiera beneficiar. Así como también un incienso aromático de jazmín o canela para ambientar el lugar. Todo esto ya es más “ornamentación” pero la imaginación y la predisposición son importantes, así que a veces hacer un poco de “teatrillo” no está demás….

La realización de este ritual puede repetirse semanalmente hasta que tu problema se haya solucionado, sin importar el día que lo hagas. Lo importante es que elijas bien el color de la vela y que la petición la hagas con los mejores deseos.

Seguramente, verás en las vitrinas de las santerías velas nudos de color negro, pero este color no es aconsejable usarlo

Cabe destacar, que cada vez que enciendas una vela debes hacerlo en lugares no inflamables, lejos de ventanas abiertas y que siempre debes controlar la forma en que se consume la vela para tu mayor tranquilidad.

Y como decía al principio, solo pongo este pequeño y simple ritual a modo de curiosidad o para hacer en pequeños problemillas que tengáis, os pongo un ejemplo si os hacéis un corte pequeño, os lo curáis en casa y no pasa nada, pero si os cortáis con necesidad de puntos, lo mejor indiscutiblemente será acudir a un médico especializado…Así que sed capaces de discernir la gravedad he importancia de vuestro problema…pero ante la duda, siempre mejor acudir a un mago.

Un abrazo